Kerry y García Margallo Han abordado el estado de las relaciones bilaterales y temas internacionales.
Los dos jefes de la diplomacia han destacado entre varios acuerdos, entre ellos figura la limpieza del suelo contaminado de la localidad Palomares (Sureste) donde eEEUU colaborará.
Entre varios puntos la carta de intenciones firmada expresa:
El Reino de España y los Estados Unidos de América (en adelante denominados colectivamente
“los Participantes”) manifiestan su intención de cooperar en un programa para una mayor
rehabilitación del entorno del accidente radiactivo en las proximidades de Palomares (España)
y con ese objeto tienen previsto negociar, tan pronto como sea posible, un acuerdo para
determinar las actividades, funciones y responsabilidades precisas de ambos Participantes
para ejecutar el proyecto de rehabilitación y depósito.
Los Participantes reconocen que, el 17 de enero de 1966, se produjo en Palomares (España) un
accidente causado por la colisión de dos aviones de las Fuerzas Aéreas estadounidenses, a raíz
del cual se desprendieron cuatro armas nucleares que se transportaban a bordo. Si bien no se
produjo detonación nuclear alguna debido al accidente, la liberación accidental de material
fisionable de dos de las armas provocó la contaminación radiactiva del suelo en la población y
en las zonas rurales circundantes. En los meses siguientes al accidente de 1966, el
Departamento de Defensa estadounidense, cooperando plenamente con las autoridades
españolas, restauró muchas de las zonas afectadas. Posteriormente, mediante el Acuerdo HallOtero
de 25 de febrero de 1966, España y los Estados Unidos convinieron en llevar a cabo una
serie de estudios de la zona en colaboración.
Una guitarra para Kerry y un tango de Gardel
En la visita a la cancillería, García-Margallo le regaló a John Kerry una guitarra española y entre bromas le pidió que interpretara el famoso tango de Carlos Gardel: “Volver” que el diplomático de España utilizó para parafrasear una parte de la letra en referencia a los años que han transcurrido desde el accidente de Palomares: “Veinte años no es nada, pero cincuenta son muchos años”, dijo al hablar sobre el acuerdo que 50 años después posibilitará la limpieza del lugar.
Sobre la foto de Kerry donde aparece intentando sacarle algún sonido a la guitarra, García- Margallo explicó que le había pedido a su colega norteamericano que cantase un tango de Carlos Gardel: Volver en la parte que dice “veinte años no es nada”, dijo el ministro español.
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