El triunfo de las ballenas: Japón fracasa en su pedido de volver a la caza comercial

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Projeto Baleia Jubarte/Petrobras

Finalizó este viernes (14) la Conferencia Internacional de la Ballena (CIB), celebrada esta semana en Florianópolis, Brasil. En el último día, una votación importante determinó la garantía de la protección de las ballenas contra la caza comercial. Con ello, se mantiene la moratoria de esta práctica, con la excepción de casos para la subsistencia de algunos grupos, como esquimales.

Por mayoría de votos, fue derrotada una propuesta presentada por la delegación japonesa que traía dos cambios. La primera era la creación de un comité de caza sostenible. El órgano sería responsable de evaluar situaciones en que la actividad podría ser permitida y presentaría a la Comisión Internacional de la Ballena para evaluación y deliberación.

La segunda propuesta era el cambio en la forma de votación. Actualmente, para enmendar o alterar la convención internacional sobre el tema, se necesitan tres cuartos de los votos, o el apoyo de al menos el 75% de los países presentes en los encuentros internacionales. Por la redacción sugerida por Japón, esa exigencia caería al menos al 51%, o mayoría absoluta.

Según la coordinadora del Centro Nacional de Investigación y Conservación de Mamíferos Acuáticos (CMA) del Instituto Chico Mendes de Conservación de la Biodiversidad Fábia Luna, la negativa fue importante para no abrir una brecha que podría ser explotada en los años siguientes.

“Eso acabaría flexibilizando para que en la próxima reunión Japón pudiera tener más países para votar con ellos, por ejemplo la caída de la moratoria”, explica Luna. La moratoria es la prohibición de la caza comercial prevista en la Convención y que es cuestionada por Japón y otros países, como Noruega e Islandia. La delegación de Brasil votó en contra de la propuesta japonesa, informó el representante de ICMBio la Agencia Brasil .

En el encuentro se discutió también la liberación de la caza para algunos grupos poblacionales con tradición de consumo del animal, como aborígenes. Hubo el permiso en algunos casos. Según Fábia Luna, Brasil se abstuvo por concordar con algunos casos, como el de poblaciones de Alaska, y discrepar de otros, como especies que transitan entre Groenlandia y la región del Caribe.

Declaración

Ayer (13), las delegaciones ya habían aprobado la declaración del encuentro, que reafirmó el mantenimiento de la moratoria de la caza comercial. El documento también rechazó el uso de métodos letales de investigación involucrando al animal, en privilegio de aquellas técnicas que no resulten en muerte.

En cuanto a la subsistencia de grupos aborígenes, el texto enfatiza que ésta debe ir al encuentro de los objetivos de conservación de la convención internacional, teniendo en cuenta la seguridad de cazadores y el bienestar de mamíferos acuáticos.