Thomas Helbling, economista del Fondo Monetario Internacional expresó que las relaciones que mantiene Argentina con los inversores extranjeros, se ha ido deteriorando en el transcurso de los últimos años, calificando su presente como “imprevisible”.
“Pienso que ha habido un cierto deterioro del clima para los inversores en Argentina en los últimos años”, expresó el funcionario de la organización financiera internacional, ante la decisión del gobierno sudamericano de que va a expropiar 51 por ciento de la compañía petrolera Repsol-YPF.
El FMI prevé un crecimiento de la economía del país suramericano de un 4.2 por ciento en 2012, cifra que se basa en datos entregados por el gobierno argentino, las que en la actualidad, son objeto de disputas con el fondo, debido a que los patrones de medición que se utilizan son rechazados por las autoridades argentinas desde el 2006.
En la misma línea las autoridades del gobierno de Cristina Fernández, rechazan la visita de los economistas del FMI en misiones de evaluación económica, transgrediendo el artículo IV de los estatutos del FMI, que dispone revisiones de las políticas económicas de sus miembros, con el objeto de establecer si son acordes con la estabilidad del sistema financiero global.
“En general, las intervenciones a discreción del gobierno que empeoran el clima, lo convierten en más imprevisible, no ayudan a la inversión ni al crecimiento a largo plazo. Ya hemos tenido en cuenta eso en las previsiones”, aseguró Helbling al ser consultado por la situación que afectó a la compañía de capitales españoles Repsol- YPF.