Los presidentes del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, abogaron por que el G-20 centre sus debates en torno al desarrollo del crecimiento económico y la creación de empleo.
Las declaraciones las realizaron los diplomáticos europeos, de cara a la próxima cumbre del G-20 que se celebrará el 18 y 19 de junio en Los Cabos (México) y ante las amenazas de extenderse los desequilibrios de los mercados a otras zonas del globo.
“Deberíamos dar un mensaje de crecimiento fuerte y creíble. Se necesita un mayor compromiso y una acción de cooperación de todos los miembros del G20”, expresó Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso, en un comunicado difundido por los medios de comunicación.
En la misma línea los diplomáticos expresaron la necesidad, de que en la próxima cumbre del G 20 en México, entregue un plan de acción sólido en materia de crecimiento y generación de empleo, sustentado en el acuerdo logrado en la cumbre de Cannes (Francia) y bajo los datos económicos que persisten en la actualidad en el mundo.
“Haremos hincapié en la manera en que estamos decididos a facilitar una respuesta integral a la crisis de la deuda soberana: abordar los retos de los países vulnerables, y apoyar el crecimiento a través de una dura reforma estructural y de una consolidación fiscal diferenciada y que permita el crecimiento”, relata el documento.
Por otra parte la misiva expresa que se debe reforzar la arquitectura financiera internacional, hacer “progresos sustanciales” en la reforma del mercado financiero, resolver la seguridad alimentaria y promover el desarrollo, entre otras acciones.