El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja ha sido galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional 2012, según hizo público hoy en Oviedo el Jurado encargado de su concesión.
El Jurado de este Premio –convocado por la Fundación Príncipe de Asturias– estuvo presidido por Gustavo Suárez Pertierra e integrado por Pedro Alonso Fernández, Enrique Barón Crespo, José María Bergareche Busquet, Eugenia Bieto Caubet, Silvia Escobar Moreno, Jorge de Esteban Alonso, Gloria Fernández-Lomana García, Enrique Fernández-Miranda y Lozana, duque de Fernandez-Miranda, Isabel Gómez-Acebo y Duque de Estrada, Ricardo Martí Fluxá, José María Martín Patino, Jaime Montalvo Correa, Luis Javier Navarro Vigil, Francisco Pinto Balsemão, Marta Reynal-Querol, Rafael Sánchez-Barriga Fernández, Luis Sánchez-Merlo y Ruiz y Alicia Castro Masaveu (secretaria del jurado).
El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja está considerado la mayor red humanitaria del mundo. Su misión es prevenir y aliviar el sufrimiento humano, proteger la vida y la salud y hacer respetar a las personas en tiempo de conflicto armado y en otras situaciones de urgencia. El germen de la Cruz Roja se gestó cuando Henry Dunant, tras la batalla de Solferino (Italia) en 1859, organizó a la población para socorrer a más de 40.000 personas que yacían muertas o heridas sin atención alguna. Propuso, entonces, la creación de sociedades nacionales de socorro para ayudar a heridos en combate, señalando así el camino hacia los futuros Convenios de Ginebra.
El Movimiento Internacional pronto evolucionó hacia las tres líneas de trabajo actuales: acción humanitaria hacia las víctimas de los conflictos bélicos, acción humanitaria hacia las víctimas de desastres naturales y de otro tipo en tiempo de paz, y acción preventiva y en favor del bienestar social y de la calidad de vida.
La Cruz Roja nació en 1863 cuando cinco ciudadanos de Ginebra, incluido Dunant, fundaron el Comité Internacional para el Socorro de los Heridos que más tarde daría lugar, al Comité Internacional de la Cruz Roja. Al año siguiente, 12 gobiernos adoptaron el primer Convenio de Ginebra que garantizaba la ayuda a los heridos en el campo de batalla y definía los servicios médicos como neutrales. La labor de Henry Dunant fue reconocida en 1901 con el primer Premio Nobel de la Paz, junto con Frédéric Passy.
El Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, presente en 186 países y sustentado por más de 100 millones de voluntarios, está compuesto por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja y 187 Sociedades Nacionales. Cada uno de ellos tiene identidad jurídica, estructura y cometido independientes aunque están unidos por siete principios fundamentales: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad.
Presidente del Gobierno de España envía felicitación
Mariano Rajoy, ha remitido un telegrama de felicitación a la Cruz Roja y a la Media Luna Roja, cuyo Movimiento Internacional ha sido galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional. El telegrama, remitido al presidente de la Cruz Roja Española, Manuel del Toro Rivero, dice lo siguiente:
“Deseo trasmitirle mi más sincera y calurosa felicitación por la concesión del Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional 2012 al Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, en reconocimiento a la inestimable labor humanitaria del Movimiento desde 1863.
El Premio refleja la admiración y respeto que inspira la labor que el Movimiento lleva a cabo día a día en favor de la vida humana, de la dignidad y la salud de las personas. Esta labor es además particularmente necesaria en caso de conflictos, como Siria, Libia o Somalia y de desastres naturales, como en Haití, Indonesia y Japón, que el jurado ha tenido particularmente en cuenta.
Le ruego transmita mi felicitación a los voluntarios de la Cruz Roja Española a los que animo a continuar dando ejemplo de imparcialidad, de unidad, de humanidad y en definitiva, de promoción de la paz.
Mariano Rajoy Brey.
Presidente del Gobierno”.