Se había especulado sobre esta reunión debido a la fría relación del Gobierno de Cristina Kirchner a causa de las críticas de Bergoglio que siempre había pedido mejores políticas sociales de atención a los pobres.
Pero el Santo Padre ha vuelto a dar muestras de una calidez humana única y la ha recibido con todos los honores. La presidenta por su parte llevó varios regalos que entregó a Francisco; entre ellos un set para tomar mate. En tanto Francisco le regaló una Mayólica con la imagen de la Iglesia de San Pedro.
Por su parte el sacerdote uruguayo Gonzalo Aemilius, amigo personal del Papa, contó desde Roma a Radio Sarandí de Montevideo que cuando Bergoglio era cardenal en Argentina, Cristina Kirchner “lo hizo esperar cuatro horas en la puerta de su despacho y no lo pudo atender. Él la recibió apenas llegó. Ella pisó suelo italiano y la primera audiencia que da es a ella” concluyó.
Cuando el Sumo Pontífice rompió el protocolo al saludarla, la mandataria expresó que: “Nunca me había besado un Papa”.
En tanto el vocero del Vaticano, Federico Lombardi, informó a los periodistas que no habrá un comunicado oficial sobre el encuentro del Papa con la presidenta argentina. “Es natural que si viene la presidenta argentina, que es del país del Papa, el Papa la reciba de manera diferente”.
Contrariando a los deseos del Papa que pidió a los argentinos que no viajaran a Roma para su asunción de este martes y que donaran el dinero del billete para ayudar a los pobres, la delegación oficial argentina con la presidenta a la cabeza, se compone de 140 personas, entre quienes figuran personalidades de varios sectores de la política de dicho país y de los sindicatos.
La Presidenta arribó ayer a Roma y en las últimas horas de anoche lo fueron haciendo los integrantes de la comitiva oficial argentina que mañana presenciarán en el palco de las delegaciones extranjeras, la misa de inauguración del pontificado de Francisco.
El avión oficial el Tango 01 debió ser dejado en Marruecos, ya que se teme un posible embargo por las deudas que mantiene Argentina con los llamados “fondos buitre”. El tramo entre Marruecos y Roma se realizó en un jet privado.