El Ministerio de Desarrollo Social (Mides) destacó los programas sociales cumplidos durante el primer semestre del año como el Pacto Hambre Cero contra la desnutrición y de transferencias monetarias, que benefician millones de guatemaltecos de escasos recursos.
En esta línea y según las estadísticas del Ministerio de Finanzas, hasta junio la ejecución presupuestaria del Mides ascendía a 31,33 por ciento.
El presupuesto se destinó a los cuatro principales programas del Mides, como son la Bolsa de Alimentos, Comedores Seguros, Escuelas Abiertas y Bono Seguro, iniciativas que benefician a unos seis millones de guatemaltecos y que han permitido el desarrollo de la sociedad.
De la misma forma se valoró la entrega de raciones de alimentos a las familias de escasos recursos de comunidades del interior; y el pago de transferencias monetarias condicionadas a madres de niños en edad escolar y menores de cinco años.
Salud
Por otra parte el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) distinguió las campañas de vacunación impulsadas entre enero y julio de este año, las que beneficiaron a 320 mil menores de familias de escasos recursos a nivel nacional.
Ante esto el titular del MSPAS, Luis Enrique Monterroso, dijo que las jornadas de vacunación son parte de las acciones que impulsa el gobierno para proteger a la población de enfermedades que se pueden prevenir. Precisó que la meta de inmunización en el 2015 es llegar por lo menos a 400 mil menores de los 22 departamentos del país.
“Nuestro objetivo es alcanzar al 100 por ciento de los niños menores de un año con su esquema de vacunación completa; el último reporte indica que llegamos a un 80 por ciento”, destacó.
Las vacunas que se aplican combaten enfermedades como la hepatitis B, BCG, polio, rotavirus, neumococo, sarampión, poliomielitis, rubeola, tétanos neonatal, difteria y tos ferina.
La administración de vacunas es gratuita de acuerdo con el calendario nacional para niños menores de 6 años, y mujeres de 15 a 49, además de algunos grupos de población priorizados para protegerlos contra enfermedades que pudieran provocar muerte o daño irreversible a la salud como el caso de sarampión, síndrome de rubeola congénita y polio, entre otras.
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