En un comunicado, el órgano de decisión de la Comisión de Ética de la FIFA, presidido por Hans-Joachim Eckert, ha decidido imponer a Chuck Blazer —exmiembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y exsecretario general de la CONCACAF—, la prohibición vitalicia de participar en todo tipo de actividad relacionada con el fútbol en los ámbitos nacional e internacional.
La decisión se basa en las investigaciones realizadas por el órgano de instrucción de la Comisión de Ética en respuesta al informe final de la Comisión de Integridad de la CONCACAF y los últimos hechos presentados por la fiscalía general estadounidense del Distrito Este de Nueva York.
El comunicado agrega que: El Sr. Blazer cometió numerosas infracciones de manera constante y repetida mientras ejercía varios cargos directivos e influyentes en la FIFA y en la CONCACAF. Como oficial de fútbol, fue una pieza esencial en las tramas de ofrecimiento, aceptación, pago y recepción de sumas ilegales y no declaradas, soborno, corrupción y otros delitos económicos. Se le ha declarado culpable de violar los artículos 13 (Reglas generales de conducta), 15 (Lealtad), 16 (Confidencialidad), 18 (Obligación de denunciar, cooperar y rendir de cuentas), 19 (Conflicto de intereses), 20 (Aceptación y ofrecimiento de obsequios y otros beneficios) y 21 (Cohecho y corrupción) del Código Ético de la FIFA.
Pero la FIFA no menciona que el suspendido Chuck Blazer-que si bien habría cometido ilícitos- fue quien denunció todos los hechos de corrupción dentro de la organización del fútbol mundial al FBI. Tampoco suspenden a quienes están detenidos por ser partícipes de esos presuntos hechos de corrupción.
R.C. Gómez
Opinión
