Con tal de hacer méritos ante el “dictadorzuelo”, como lo califica el secretario general de la OEA, Luis Almagro, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, ha cometido la torpeza (una más), de postrarse ante el presidente que reconoce hablar con los pájaros y acatando sus locuras ha invalidado la firma para pedir el referéndum revocatorio de Lilian Tintori, la esposa del líder opositor Leopoldo López, preso político del régimen chavista.
Entre los secuaces de Maduro, no hay uno, tan sólo uno que le explique que cada día se hunden más y más en el lodo de la irresponsabilidad y la locura. No lo van a escuchar, si existiera ese secuaz sensato, porque la desesperación por perder el poder, corre pareja para todos.
Después, aparecen países que no se atreven a ponerle freno al totalitarismo de Maduro, con la Unasur obsecuente que invita al diálogo a las partes, sabiendo que Maduro no acatará nada de lo que pueda llegar a pactarse.
La mediación que ha intentado el expresidente español Rodríguez Zapatero, junto a dos expresidentes de países de la región va camino al fracaso como ya lo ha anunciado un editorial del The Washington Post donde explica que Zapatero y los dos exmandatarios que han intentado mediar, ‘no han logrado nada, por la misma razón que Kerry ha fracasado en Siria: carecen de influencia sobre un régimen criminal y sin concesiones’.
El CNE anuló la firma de más de 600 mil venezolanos. La mía es una de ellas, pero eso no va a detener el cambio! pic.twitter.com/JcAdagymmn
— Lilian Tintori (@liliantintori) 10 de junio de 2016