El representante del terrorismo de Estado chavista, con el natural cinismo del régimen, dijo a los medios de prensa: “No puede Naciones Unidas, y se lo decíamos a su Secretario General, quedarse de brazos cruzados y no condenar estas acciones. No sólo al Secretario General, también a la Asamblea General de Naciones Unidas le solicitaremos tomar posición sobre estas amenazas insólitas, anacrónicas, hostiles, inamistosas, que no podemos aceptar bajo ningún concepto”.
Sin admitir la cruel represión y los asesinatos perpetrados por el gobierno de Maduro, el mandadero Arreaza (yerno de Hugo Chávez), señaló que el gobierno venezolano responderá usando la diplomacia, llamando al diálogo y defendiendo tanto a su pueblo como a la democracia en el país. “Ojalá que el presidente Trump y su gobierno comprendan que éste es el mundo del diálogo, no el mundo de las guerras, que ya está bueno de guerras y que tenemos que respetar a los pueblos”, enfatizó.
Mientras el ministro Arreaza visitaba al líder de Naciones Unidas, la embajadora de Estados Unidos ante el organismo mundial, sostuvo ante los periodistas que las nuevas sanciones a Venezuela envían un mensaje sólido al gobierno del presidente Nicolás Maduro.
“No respaldaremos la dictadura que está tratando de establecer y continuaremos tomando medidas decisivas hasta que él dé pasos que regresen a Venezuela a ser la democracia próspera que fue algún día”, apuntó.
R.C. Gómez
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