Respecto a lo ocurrido la semana pasada en el Parlamento de Cataluña, ha reiterado que “fue un acto claramente antidemocrático” porque no solo se “privó” a los diputados de sus derechos, sino que “se cambió la legalidad, se liquidó la soberanía nacional y se convocó un referéndum”. Es decir, “fue un golpe a la democracia como no hemos visto nunca”.
En cuanto a la oferta de diálogo de Carles Puigdemont, el presidente ha explicado que “llevamos mucho tiempo hablando”, pero algunas cosas son “innegociables” porque supondría “liquidar la soberanía nacional y pasar por encima de la Constitución y del Estatuto de Autonomía de Cataluña”. Ha agregado que “ningún gobierno democrático en ningún país del mundo” aceptarían “algo de esas características”.