Luego de cinco días de protestas, con graves incidentes que dejaron un saldo de al menos 27 personas fallecidas por la brutal represión del gobierno de Daniel Ortega, el mandatario de Nicaragua anunció este domingo que el consejo directivo del INSS revocaba la reforma de la seguridad social, aprobada el 16 de abril, la cual aumentaba las cotizaciones y deducía el 5% a las pensiones.
Cercado por las manifestaciones de los ciudadanos nicaragüenses que en forma masiva salieron a las calles y debieron enfrentar a las fuerzas del régimen que actuaron en forma salvaje reprimiendo las protestas, Ortega dio marcha atrás en su reforma y dijo este domingo que “Esto ya es una resolución que anula la anterior resolución. O sea, queda la mesa limpia para sentarse a tratar el tema, ¿con quiénes? Con los empleadores, con los trabajadores y habrá que hacer una mesa muy particular, por la relación que hemos desarrollado con las zonas francas”.
Ortega dijo lamentar los actos violentos y expresó solidaridad para las familias de las personas que han fallecido.
También pidió la presencia de la Iglesia Católica como garante de las conversaciones.
