El Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina INDEC entregó los datos de pobreza e indigencia al 1° semestre de 2019 en el país, los que dejan al descubierto la crisis económica que vive la nación y su repercusión en los ciudadanos.
El informe especificó que en el primer semestre de 2019 el porcentaje de hogares por debajo de la línea de pobreza es del 25,4%; estos comprenden el 35,4% de las personas. Dentro de este conjunto se distingue un 5,5% de hogares indigentes, que incluyen el 7,7% de las personas.
Estos porcentajes son equivalentes a que el número de pobres pasó de 11.150.000 a 14.400.000, mientras que la indigencia en el país sudamericano llegó a 3,1 millón de personas en esta situación, sin contar la población rural.
Los indicadores mencionados registran una subida de la pobreza y la indigencia con respecto al segundo semestre de 2018 y también respecto de los consignados en el primer semestre de 2018.
Los resultados provienen y son en base a la información de la Encuesta Permanente de Hogares y la valorización de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total, instancia que efectuó la medición de la pobreza con el método de la “línea de pobreza” consistente en establecer, a partir de los ingresos de los hogares, si estos tienen capacidad de satisfacer –por medio de la compra de bienes y servicios– un conjunto de necesidades alimentarias y no alimentarias consideradas esenciales.
Por otra parte y poco antes de darse a conocer el informe del INDE el presidente de Argentina, Mauricio Macri se refirió al índice de pobreza, asegurando que “aunque ese número duela, hay que mirarlo de frente”.
“Lamentablemente va a reflejar la situación que estamos viviendo y, aunque ese número duela, hay que mirarlo de frente, como venimos haciendo todos estos años”, señaló.