Las unidades de transporte colectivo viajan en horas pico completas con pasajeros, no existiendo la necesaria distancia física entre los usuarios que recomiendan los infectólogos en la pandemia.
Quejas de los viajeros ante esta situación que parece ser de difícil solución, se reciben en los medios de comunicación, mientras desde la oficina que regula el transporte capitalino de la Intendencia municipal, se anuncia que se está trabajando en el tema y que para el mes de agosto se estarían aumentando las frecuencia de los servicios para evitar esta preocupante situación.
Los especialistas recomiendan que los autobuses viajen con las ventanillas abiertas pero el intenso frío invernal ocasiona molestias donde se agrega que algunos pasajeros no cumplen con la normativa y no llevan el tapabocas obligatorio.
Tampoco los choferes o guardas de los medios de transporte pueden conminar al pasajero a utilizar la mascarilla, ya que Juan Salgado, presidente de Cutcsa y de la Cámara del Transporte, dijo que los empleados de las empresas de ómnibus no actuarán como policías para obligar a los usuarios a ponerse tapabocas.
En otros países como por ejemplo España y Argentina, se ha limitado la cantidad de pasajeros en las líneas de transporte público conservar la distancia social y evitar que los autobuses sean una fuente de contagio del coronavirus.
