
El presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, recibió este jueves a una delegación de la Asociación Toda la Verdad que reúne a familiares de víctimas de los Tupamaros, comandos subversivos que en épocas de democracia atentaron contra personas e instituciones previo al golpe de Estado, que llegó a consecuencia de las acciones de los guerrilleros tupamaros.
Luego de la reunión con el mandatario, Diego Burgueño, miembro de dicha asociación e hijo de Carlos Burgueño, un civil muerto en el ataque de los tupamaros a la ciudad de Pando el 8 de octubre de 1969, dijo a los medios que “Esto marca un hito. Que un presidente en ejercicio tome en cuenta recibir a los familiares de víctimas de la sedición. Además, la receptividad en base a nuestros reclamos ha sido muy positiva. Le planteamos nuestras inquietudes con respecto al reconocimiento que debe haber para esta parte de la sociedad que ha sido con premeditación y alevosía olvidada y puesta debajo de una alfombra”, señaló.
Por otro lado, Burgueño pidió reunirse con autoridades de la Educación para “hacer una revisión de todos los libros que han salido en estos últimos años donde se cuenta una historia a nuestro parecer claramente distorsionada en los últimos 40 0 50 años”.
Según consigna el diario El País, Burgueño agregó, “hasta ahora se ha transmitido a las nuevas generaciones una idea trágicamente errónea de heroicidad”. Indicó que “se le denomina guerrillero a quien fue terrorista” y que se les entregan “plaquetas a quienes fueron asesinos de nuestras familias”. explicó que hay “un relato falso, amnésico o recortado, como quieran llamarle”.
“Hay hechos que no se han contado de torturas, secuestros, robos, atentados. Uno lo dice sin rencor, simplemente quiere que se diga la verdad”, puntualizó Burgueño.
También aclaró que siente “un total respeto con las víctimas de la dictadura” y que “todas las familias tienen derecho a querer buscar a sus seres queridos”.