La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la demócrata Nancy Pelosi, anunció este viernes que ha dado instrucciones al Comité de Normas de la cámara Baja para que “este preparado” para poner en marcha un juicio político contra el presidente Donald Trump en caso de que no dimita.
“La esperanza de los congresistas es que el presidente renuncie inmediatamente. Pero si no lo hace, he dado instrucciones al Comité de Normas para que esté preparado para avanzar con la 25ª Enmienda de la Legislación del Congresista Jamie Raskin y ponga en marcha el impeachment“, señaló Pelosi en un comunicado.
Los legisladores demócratas se reunieron virtualmente este viernes para discutir la posibilidad de llevar al presidente Donald Trump a juicio político, dos días después de que el Capitolio fuera asaltado por cientos de seguidores del ya mandatario saliente.
En los últimos días, tanto Pelosi, como el líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, han pedido la destitución de Trump, a quien acusan de incitar a sus seguidores a asaltar la sede del Poder Legislativo.
Pelosi adelantó el jueves en la tarde que la Cámara estaba dispuesta a actuar si el vicepresidente y otros funcionarios no invocaban la sección cuarta de la 25ª enmienda, que llevaría a la destitución forzosa del presidente por parte de su gabinete.
Los cargos
Algunos legisladores han desvelado incluso que los demócratas ya tienen preparados los cargos que presentarían en caso de que se inicie un nuevo juicio político, que sería el segundo al que se enfrentaría Trump en apenas cuatro años de presidencia.
Dos fuentes familiarizadas con el asunto dijeron a Reuters que los artículos de juicio político, que son cargos formales de mala conducta, fueron elaborados por los congresistas demócratas David Cicilline, Ted Lieu y Jamie Raskin. Lieu dijo en un tuit que el borrador cuenta con el apoyo de más de 150 legisladores.
La copia del documento que circula entre los miembros del Congreso y que fue publicada por la representante Diana DeGette, acusa a Trump de “incitar a la violencia contra el gobierno de Estados Unidos” en un intento por revertir su derrota ante el presidente electo Joe Biden en las elecciones presidenciales del pasado 3 de noviembre.
Con los demócratas reteniendo el control de la Cámara, necesitarían dos tercios del Senado —de mayoría republicana—para aprobar los artículos de juicio político. El senador republicano Ben Sasse dijo a la cadena CBS que “definitivamente consideraría” apoyar el esfuerzo de los demócratas porque el presidente ha “menospreciado su juramento”.
Por su parte, la senadora republicana Lindsey Graham, expresó su rechazo por el posible segundo juicio político en su cuenta de Twitter. “Si la presidenta Pelosi presiona para impugnar [al jefe de Estado] en los últimos días de la presidencia de Trump hará más daño que bien”, escribió Graham.
En similar sentido se expreso la Casa Blanca, que, en un comunicado, aseguró que es el “momento de curar las heridas”.
“Un impeachment contra el presidente motivado por intereses políticos, a sólo 12 días del término de su mandato sólo servirá para dividir aún más a nuestro gran país”, agrega el despacho.
Trump no acudirá a toma de posesión del presidente electo Biden
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el viernes que no participará de la toma de posesión de su sucesor, el presidente electo Joe Biden, horas después de prometer una transición pacífica del poder.
“A todos los que me han preguntado, no iré a la Inauguración el 20 de enero”, escribió Trump en su cuenta de Twitter.
El escueto comentario da respuesta a una de las mayores incógnitas de la actual transición de poder en la Casa Blanca, un proceso que ha estado marchado por hechos sin precedentes en la historia de un acontecimiento clave para la democracia estadounidense.
El breve anuncio de Trump llega un día después de su reconocimiento el jueves de que deberá abandonar la Casa Blanca el 20 de enero para que tome su lugar el presidente electo Joe Biden.
“Ahora el Congreso ha certificado los resultados, el 20 de enero asumirá el poder una nueva administración”, señaló Trump el jueves a través de un vídeo que compartió a través de su cuenta de Twitter.
No obstante, Trump no ha concedido la derrota ni ha retirado las acusaciones sin pruebas de supuesto fraude electoral, que ha sido parte de su discurso y de sus seguidores, incluyendo los que entraron por la fuerza en el Capitolio el miércoles, generando caos en el intento por impedir la refrendación de la victoria de Biden en el Congreso, una ceremonia que terminó finalmente en la madrugada.