Una redada policial contra el narcotráfico que se llevó a cabo este jueves en la favela de Jacarezinho en Río de Janeiro, dejó un saldo de 25 muertos.
De acuerdo a la Policía, la operación buscaba desarticular una banda de tráfico de drogas, y los fallecidos serían sospechosos de robo, asesinato y secuestro de trenes.
La operación, con intensos tiroteos, se desarrolló en los alrededores de la estación Triagem y dos pasajeros llegaron a ser baleados dentro de un vagón del metro, aunque sobrevivieron.
Un agente de la Policía Civil también resultó herido durante el tiroteo, según las primeras informaciones.
La organización Amnistía Internacional Brasil pidió este jueves explicaciones al gobernador del estado de Río de Janeiro (sureste), Claudio Castro, por la operación policial que derivó en la muerte de 25 personas (24 sospechosos y un policía) en una favela de la zona norte de la ciudad.
La Policía Civil de Río de Janeiro justificó este jueves la operación realizada en la favela de Jacarezinho que dejó 25 muertos -un agente de policía y 24 sospechosos-, porque según uno de los responsables del operativo, se trataba de “asesinos”.
“Eran criminales, bandidos, traficantes y homicidas, porque ellos intentaron matar a los policías y no hubo más remedio que repeler esa injusta agresión, desgraciadamente lo que nos causa mucho dolor es la muerte de nuestro colega”, dijo el subsecretario operacional de la Policía Civil, comisario Felipe Curi, en rueda de prensa.
Según el funcionario, las muertes se produjeron porque los sospechosos opusieron resistencia cuando los agentes entraron en la favela. (Sputnik)
