El izquierdista Pedro Castillo Terrones, juró hoy como presidente constitucional de la República para el período 2021-2026, durante la sesión solemne realizada en el hemiciclo del Congreso, en presencia de cinco mandatarios de la región y del rey Felipe VI de España. En el mismo acto también recibió la Banda Presidencial.
La ceremonia se realizó poco antes del mediodía y contó con la asistencia de los mandatarios de Argentina, Alberto Fernández; de Bolivia, Luis Arce; de Colombia, Iván Duque; de Chile, Sebastián Piñera; y de Ecuador, Guillermo Lasso; así como de los vicepresidentes de Brasil, Hamilton Mourao; y de Paraguay, Hugo Velázquez; del canciller de Uruguay, Francisco Bustillo; y del expresidente boliviano, Evo Morales.
También estuvieron presentes los representantes de las diversas bancadas parlamentarias, autoridades políticas, civiles, militares y eclesiásticas, así como miembros del Cuerpo Diplomático acreditado en el país.
“Yo, José Pedro Castillo Terrones, juro por Dios, por mi familia, por mis hermanas y hermanos peruanos, campesinos, pueblos originarios, ronderos, pescadores, docentes, profesionales, niños, jóvenes y mujeres, que ejerceré el cargo de presidente de la República en el período constitucional 2021-2026. Juro por los pueblos del Perú, por un país sin corrupción y por una nueva Constitución”, pronunció al asumir el cargo.
Acto seguido, la presidenta del Congreso de la República, María del Carmen Alva, le impuso la Banda Presidencial.
Tras la entonación del Himno Nacional, la titular del Parlamento invitó al estrado a Dina Boluarte para prestar juramento como primera vicepresidenta de la República para el mismo período. Luego, María del Carmen Alva invitó al presidente Castillo a dirigir su Mensaje a la Nación.
Castillo gobernará con un Congreso dominado por los partidos opositores y tendrá que negociar para sacar adelante leyes por consenso.
Tiene el nuevo mandatario otro problema a resolver, porque su mentor y líder de su partido Perú Libre, Vladimir Cerrón, esta condenado por hechos de corrupción