En medio de la intolerancia hacía las víctimas de ETA, los defensores de los criminales, la plataforma Sare de Mondragón y el colectivo Elkartasun Eguna, realizarán una provocadora marcha de homenaje al salvaje y cruel asesino etarra, Unai Henri Parot.
El integrante de ETA está en la cárcel condenado como responsable de hasta 39 asesinatos.
En la convocatoria de los colectivos proetarras nada se dice sobre que el homenajeado acumula hasta 26 sentencias condenatorias por su participación en numerosos atentados que acabaron con la vida de 39 personas.
El lugar es la localidad guipuzcoana de Mondragón (Arrasate). La fecha es el próximo 18 de septiembre. Allí y ese día se celebrará una “marcha solidaria” en recuerdo del único miembro de ETA de este pueblo que queda en la cárcel: Henri Parot, según informa Vozpópuli.
El colectivo ultra, Sare, dijo en las redes sociales en defensa del asesino: “El 18 de septiembre proclamaremos la liberación de Unai Parot, que lleva 31 años en prisión, unidos por diferentes actores en Mondragón. Porque la ley lo dice y porque es su derecho”.
“Parot es un asesino, no un héroe”, dicen las víctimas
La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) de España informa en un comunicado:
Mientras el próximo sábado 18 de septiembre en la localidad guipuzcoana de Mondragón se rendirá homenaje al sanguinario terrorista etarra Henri Parot, autor de 39 asesinatos, la AVT ha convocado cuatro homenajes en algunos de los lugares donde asesinó a sus víctimas.
Los homenajes, que comenzarán a las 11h y consistirán en una ofrenda floral y la lectura de un manifiesto, tendrán lugar en los siguientes puntos:
- Madrid: Monumento a las víctimas del terrorismo en la Plaza de la República Dominicana (a la altura del nº4).
- San Sebastián: Monumento a las víctimas del terrorismo en los Jardines de Alderdi Eder.
- Zaragoza: Parque de la Esperanza situado en la Plaza Mozart (antigua Casa Cuartel).
- Granada: Glorieta Víctimas del Terrorismo (Neptuno), entre la Mae West y el Hotel Barceló Granada
Numerosos representares políticos y víctimas del terrorismo han confirmado ya su presencia en estos actos en los que esperamos también nos acompañen los ciudadanos. Porque una sociedad sana no puede permitir que los terroristas sean homenajeados como héroes. Porque lo que de verdad buscan con este tipo de homenajes, es la puesta en libertad antes de tiempo de los presos etarras justificando todos y cada uno de sus delitos. Porque las víctimas no merecemos que se nos humille y se pise nuestra dignidad.
Un salvaje asesino
Henri Parot, Unai (Argel, Francia, 6 de enero de 1958) es un miembro de la organización terrorista ETA. Formaba parte del comando itinerante de ETA o comando “Argala”, y fue capturado en abril de 1990. Recibió 26 sentencias condenatorias con las que sumó casi 4800 años de prisión por su asesinatos.
En 1978 Parot contactó con ETA, a través de Domingo Iturbe Abasolo, que llegaría a ser uno de los líderes de la organización, y quien supuestamente le propuso ingresar en un nuevo comando “itinerante”, denominado dentro de la organización como “Argala”. Este comando estaba formado íntegramente por ciudadanos de nacionalidad francesa, lo que les permitía moverse con cierta libertad, sin levantar sospechas, por toda España.
Parot cometió su primer asesinato el 2 de noviembre de ese año en Irún, cuando él y Jean-Pierre Erremundeguy dispararon a bocajarro sobre el industrial José Legasa, que se había negado a pagar el impuesto revolucionario.
Este comando perpetró veintidós atentados en los que murieron asesinadas 38 personas y resultaron heridas más de doscientas, sobre todo militares y guardias civiles, incluyendo atentados como el asesinato del general Guillermo Quintana Lacaci, siendo el propio Parot el asesino material, acompañándole el también etarra Lasa Mitxelena como conductor del Renault 18 de color blanco en el que perpetraron dicho asesinato, o la voladura de la casa cuartel de Zaragoza el 11 de diciembre de 1987 donde causó 11 muertos (entre ellos cinco niñas).
El 2 de abril de 1990 fue detenido en Sevilla, conduciendo un coche cargado de explosivos con el que pretendía volar la Jefatura de Policía, tras intentar sobrepasar un control rutinario de la Guardia Civil con cuyos agentes sostuvo un tiroteo hiriendo a dos de ellos.
A Henri Parot le fueron imputados 82 asesinatos, que le supusieron 26 sentencias condenatorias con las que sumó casi 4800 años de prisión.