
Por Raúl Vallarino.-
Mientras el Mercosur, a instancias de Argentina y Paraguay, le niega a Uruguay desarrollar un Tratado de Libre Comercio (TLC) con China, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y el presidente chino, Xi Jinping, firmaron 15 acuerdos comerciales de asociación en Beijing el viernes (14 de abril). Lula fue recibido en el Gran Salón del Pueblo, sede del gobierno chino. El sector empresarial también dio a conocer 20 nuevos acuerdos entre los dos países en áreas como energía renovable, industria automotriz, agronegocios, líneas de crédito verdes, TI, salud e infraestructura, según informó la agencia estatal de noticias, Agencia Brasil.
Estos acuerdos se suman a los anunciados el 29 de marzo durante el Seminario Económico Brasil-China, totalizando más de 40 nuevas empresas conjuntas y opino que está muy bien que estos acuerdos se lleven a cabo, pero que Uruguay también pueda hacerlo sin impedimentos, ya sea como un TLC, o con el nombre que sea.
Los acuerdos forjados entre las dos naciones incluyen cooperación espacial, investigación e innovación, economía digital, esfuerzos contra el hambre, intercambio de comunicaciones y facilitación del comercio.
Ante esto, el principal obstáculo que tiene Uruguay para un TLC con China, es Argentina, pero claro, Alberto Fernández nada dirá, porque su sometimiento a Lula es total y servil.
Entonces que Uruguay haga lo mismo y solo quite del acuerdo la definición, “Tratado de Libre Comercio (TLC)”
Otros documentos firmado entre Brasil y China se centran en la certificación de productos de origen animal, así como los requisitos sanitarios y de cuarentena que deben seguir los mataderos para la exportación de carne de Brasil a China. Brasil es el mayor proveedor de carne de res del país asiático, y el 60 por ciento de la producción brasileña se vende a China.
“En el sector turístico, destacamos la inclusión de Brasil en la lista de destinos autorizados para viajar por grupos de turistas chinos, lo que representa una gran oportunidad para el crecimiento de la afluencia de visitantes entre los dos países”, afirmó el ministerio.