La tarde del jueves 6 de marzo se convirtió en una jornada de horror en el sector de Socio Vivienda 2, en el distrito Nueva Prosperina, al noroeste de Guayaquil. Una serie de ataques coordinados dejó un saldo de al menos 22 personas asesinadas, en lo que se perfila como una de las masacres más sangrientas del año en Ecuador.
El jefe policial del distrito, Herbie Guamaní, confirmó al canal Ecuavisa que el hecho se originó por un enfrentamiento entre la banda delictiva “Los Tiguerones”, y un grupo denominado “Tiguerones Fénix”. Según reportes preliminares, los atacantes irrumpieron violentamente en tres viviendas, ejecutando a sus víctimas a sangre fría. Otras personas fueron asesinadas en un condominio cercano dentro del mismo plan habitacional.
El alcalde de Guayaquil, Aquiles Álvarez, se pronunció a través de redes sociales calificando la situación en Nueva Prosperina como “una barbaridad”. Álvarez llegó a estimar el número de víctimas en 25, aunque esta cifra aún no ha sido confirmada por la Policía ni la Fiscalía.
Las imágenes de la escena del crimen reflejan un verdadero campo de batalla, con vecinos aterrorizados y un distrito sumido en el miedo. En lo que va del año, Nueva Prosperina ha registrado al menos 180 muertes violentas, una cifra alarmante que pone en entredicho el control de la seguridad en la zona.
“La locura en la que vivimos es indignante. 25 muertos en una masacre, un barrio entero aterrorizado por sicarios con fusiles, y sin embargo, hoy parece que es más importante clausurar una pizzería que enfrentar a los verdaderos criminales. ¿A dónde vamos como sociedad? ¿Cómo llegamos a este nivel de desconexión con la realidad?”, lamentó el alcalde de Guayaquil.