Los ministros de Salud de Chile, Jaime Mañalich y de Ciencias, Andrés Couve informaron a la opinión pública acerca del cambio de metodología adoptado por el Ejecutivo para contabilizar el número de personas fallecidas por el Covid-19 en el país, situación anunciada este fin de semana y que llevó a reportar 653 muertos adicionales por la pandemia.
En este sentido se argumentó que en una primera instancia se informaron los decesos de aquellas personas que tenían un certificado de defunción y una confirmación diagnóstica a través de un examen PCR positivo para COVID-19. Luego se amplió el criterio a quienes tienen el resultado de este examen pendiente.
Una tercera modificación fue el considerar como día y lugar del deceso el que reporta el Registro Civil, y no los datos que a ese respecto contiene el certificado de defunción emitido por el médico.
En esta línea Andrés Couve aseguró que la nueva modalidad para reportar los fallecidos por la pandemia cumple patrones más acertados y estrictos, por lo que la calidad de la información es mucho más transparente en relación al estado de la emergencia sanitaria en el país que ya se ha cobrado la vida de 2.264 personas y mantiene a 138.846 casos de contagios acumulados.
Ante esto el representante de gobierno dijo que este cambio metodológico representa una referencia actualizada de fallecimientos, de acuerdo a la fecha de defunción. Esto se logra mediante un cruce de aquellos inscritos en el Registro Civil en cualquiera de las causales, excluyendo aquellos que fallecen por otras causas, por ejemplo, traumas, accidentes, infartos, lamentablemente también suicidios.
“Esto responde a criterios más estrictos y cada vez más precisos, similares a lo de los países de la Unión Europea y que cumplen así con los más altos estándares internacionales en el reporte de fallecimientos, mejorando una vez más no solamente la cantidad, sino que la calidad de la información que estamos entregando diariamente”, explicó Couve.