Libertad religiosa y pobreza: el Papa Francisco recibe al presidente de México

0
146

Foto: Presidencia
Foto: Presidencia
El Santo Padre Francisco recibió este sábado en el Palacio Apostólico del Vaticano a Enrique Peña Nieto, Presidente de México el cual sucesivamente tuvo un encuentro con el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado, a quien acompañaba el arzobispo Dominique Mamberti, Secretario para las Relaciones con los Estados.
Durante las conversaciones, señala una nota de la Oficina de prensa de la Santa Sede, transcurridas en un clima de cordialidad, se ha pasado revista a algunos aspectos de la vida del país, entre ellos las numerosas reformas emprendidas y, en particular, la constitucional que concierne a la libertad religiosa.
A continuación se han abordado otros temas de interés común como la emigración, la lucha contra la pobreza y el desempleo, así como las iniciativas encaminadas a combatir la violencia y el tráfico de drogas. Por último, ha habido un intercambio de opiniones sobre temas relativos a la actualidad regional e internacional.
Mensaje de Peña Nieto luego del encuentro con el Papa

Durante mi Visita Oficial a la Santa Sede, me reuní con el Papa Francisco en un ambiente de franca amistad y buen entendimiento, lo que permitió estrechar los vínculos entre México y la Santa Sede.
Con ello, hemos dado continuidad al diálogo de alto nivel que la Santa Sede y México sostienen desde hace más de dos décadas. Le expresé al Papa que México, como Estado laico, desea mantener una relación armónica y fue un gusto constatar que el Papa Francisco está al tanto de nuestro país, de los desafíos que enfrentamos y el proceso de transformación que estamos viviendo.
Finalmente, le compartí al Papa, el deseo de los mexicanos de poder saludarlo en nuestro país, el segundo con mayor número de católicos en el mundo. Él ha aceptado la invitación de venir a México, lo que es, sin duda, motivo de gran alegría.
México reconoce la labor que Su Santidad ha emprendido, para renovar la Iglesia Católica, de cara a los desafíos de la actualidad. Celebramos su apertura y disposición para fomentar la práctica de valores universales, como la paz, el respeto y la solidaridad en el mundo. Hago votos, para que la sensibilidad y apertura que el Santo Padre ha mostrado, también se traduzcan en una mayor cercanía y cooperación entre México y la Santa Sede.