La llamada Ley Celaá que margina el idioma español en todo el Estado y hace prevalecer las lenguas regionales, fue aprobada este miércoles en el Senado con 142 votos a favor, 112 en contra y 9 abstenciones.
El gobierno de Pedro Sánchez y de Pablo Iglesias tuvo el respaldo de los separatistas de ERC, PNV, Más País, Compromís, Més Per Mallorca, En Comú Podem y Adelante Andalucía mientras que el PP, Ciudadanos, UPN, PRC y Vox rechazaron la Ley.
La nueva Ley elimina el español como lengua vehicular, limita la educación concertada y la libertad de elección de centro por parte de los padres, devalúa la asignatura de Religión y permite la promoción de curso con suspensos.
María Isabel Celaá Diéguez, ministra de Educación y Formación Profesional del Gobierno de España desde junio de 2018, para muchos críticos pasará a la historia de España como la persona que destruyó el castellano en el país.
El diario El País de Madrid dijo que “Con la Ley Orgánica de Modificación de Ley Orgánica de Educación (Lomloe), también conocida como ley Celaá, el español deja de ser considerado lengua vehicular en las aulas de las autonomías con lenguas cooficiales”.
Desde todos los ámbitos arrecian las críticas al gobierno socialista y la Real Academia Española (RAE) dijo en un comunicado que “su preocupación principal” es que la ley “no ponga en cuestión el uso del español en ningún territorio del Estado ni promueva obstáculos para que los ciudadanos puedan ser educados en su lengua materna y accedan a través de ella a la ciencia, a la cultura, o, en general, a los múltiples desarrollos del pensamiento que implica la labor educativa”.
Se consuma el atropello de la #LeyCelaá. Una contrarreforma ideológica de PSOE, Podemos y nacionalistas que ataca los derechos de las familias, arrincona el castellano y anula la meritocracia.
Lucharemos para sustituirla por un Pacto Nacional por la Educación. https://t.co/NoVrr9Ont9
— Inés Arrimadas (@InesArrimadas) December 23, 2020