El nuevo ministro del Interior de Uruguay, Luis Alberto Heber, participó este viernes 28 en la reunión de ministros de Seguridad y del Interior del Mercosur, realizada en forma virtual. El jerarca mostró su preocupación por la corriente migratoria actual, destacó la reducción en las cifras de delitos en Uruguay y expuso las principales líneas de acción del Gobierno en el combate al narcotráfico. También se le rindió homenaje a Jorge Larrañaga, el recientemente fallecido ministro de esa Cartera, que impulsó y consiguió bajar la tasa de delitos en el país en forma notoria.
Además de Heber, participaron, encabezando cada delegación, el ministro del Interior de Argentina, Wado de Pedro, el de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Anderson Torres, y el del Interior de Paraguay, Arnaldo Giuzzio. Al inicio de la actividad, Heber recibió, de sus pares en representación de los países integrantes del Mercosur, las condolencias por el reciente fallecimiento de Jorge Larrañaga.
El secretario de Estado abordó la situación sanitaria de la población carcelaria e indicó que hay una cifra récord de 13.600 personas privadas de libertad, de las cuales solo 79 padecen COVID-19, y que el 93% del total ya fueron vacunadas contra el virus SARS-CoV-2. “Es importante señalar que pasamos 11 meses de pandemia sin casos positivos en cárceles, es un compromiso de derechos humanos”, sostuvo.
Abuso del estatus de refugiado
El ministro Heber dijo estar preocupado por el ingreso a Uruguay de “una cantidad de gente de distintos países” que “está llevando a que tengamos perforaciones en la inmunidad que estamos buscando” para superar la pandemia del coronavirus y recordó que “Uruguay tiene una tradición muy antigua de apertura, sobre todo a aquellas personas que por distintas razones son perseguidas en sus países y que nosotros recibimos con los brazos abiertos, pero que, en momentos de pandemia, se ha utilizado este instituto y que ha violado las restricciones que tenemos en fronteras” propiciando una cantidad importante de contagios entre los uruguayos, señaló, aseverando que las disposiciones del Instituto del Refugiado se cumplen, pero que esto genera un problema sanitario de gravedad al país porque muchos refugiados llegan con el virus a territorio uruguayo.
“Planteamos que nos preocupa el abuso que hay del estatuto del refugiado. El Uruguay está haciendo un esfuerzo muy grande para tratar de blindar sus fronteras. Solamente tenemos permitido que ingresen al país uruguayos y extranjeros residentes, pero por el lado del estatuto del refugiado se amparan, porque es un tratado internacional y llegan de todas partes del mundo e ingresan al país. Es un tema que nos preocupa y principalmente en momentos de pandemia”, explicó a los medios de comunicación.
Heber agregó que “Estamos mirando con atención que está ingresando una cantidad de gente de distintos países, no solamente del Mercosur, y que está llevando a que tengamos perforaciones en la inmunidad que estamos buscando”, aseveró.
Preocupa la llegada de extranjeros con estatus de refugiados con covid-19 que ha perforado las normativas sanitarias dentro del país, mientras el Instituto Internacional del Refugiado exige que se les reciba, incluso desde países donde no son perseguidos.
El camino marcado que dejó Larrañaga
Al hacer referencia a la seguridad pública heber destacó: “Si dio resultado, ¿por qué vamos a cambiar?”. “Bajaron los homicidios, las rapiñas, los hurtos, se tuvo un éxito en el primer año que tuvo como ejecutor a nuestro amigo Jorge Larrañaga y creemos que ese es el camino”, subrayó.
Es incomprensible que sigan entrando refugiados sin un control estricto en momentos en que la salud de los uruguayos debe primar. La solidaridad tiene un límite y el Instituto del Refugiado, ACNUR, o quien sea deben parar la mano y no obligar a los países a recibir refugiados en pandemia.
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