La llegada constante de inmigrantes de distintas nacionalidades con intenciones de radicarse en la ciudad uruguaya de Chuy, en la frontera con Brasil, ha provocado un fenómeno social donde según la información de la alcaldesa, Mary Urse, llegan entre ocho y diez ciudadanos de Cuba y de Venezuela por día, pero también lo hacen inmigrantes de otros países, según declaraciones efectuadas a Radio Monte Carlo de Montevideo.
La alcaldesa agregó que la procedencia de extranjeros es muy variada y que allí en la ciudad tienen, venezolanos, mexicanos, chilenos, panameños, irlandeses y africanos y que ya perdió la cuenta de la cantidad, pero señala que hay más de 500 inmigrantes y la cifra va en aumento.
Destacó que hay 30 ciudadanas cubanas embarazadas que darán a luz hijos en territorio uruguayo.
Chuy es una ciudad en el extremo este de Uruguay , en el departamento de Rocha, a 340 kilómetros (211 millas) al noreste de Montevideo . Se encuentra en la frontera con Brasil , separada de su ciudad hermana brasileña de Chuí solo por una avenida compartida que sirve de frontera, y por el Arroyo Chuy hacia el este. La población de Chuy es actualmente de 9,675 residentes a partir de 2011.
Los uruguayos emigran
Por otro lado, se verifica en Uruguay una elevada cantidad de jóvenes de este país que emigran en busca de mayores oportunidades. El dirigente del opositor Partido Nacional, Alejandro Lafluf, dijo a ICN Diario: El desempleo en los jóvenes alcanza al 25%. La responsabilidad de la emigración no es de los emigrantes. Si a los uruguayos que se van les aseguraran que en nuestra tierra van a poder conseguir un empleo bien remunerado, un costo de vida que no sea prohibitivo, condiciones de vivienda, comida, transporte y seguridad digna para ellos y sus familia, se quedarían sin dudarlo. Y lo mismo con los jóvenes emprendedores o con mentalidad empresarial. Si les garantizamos un Estado dinámico que no los recargue con impuestos y que no se los trate como déspotas miserables por pretender tener un negocio rentable y productivo también se quedarían sin dudarlo, explicó Lafluf.